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El DJI Remote ID ya es oficial, y tiene a todos los pilotos de drones cabreados.
Como ya adelantábamos, DJI estaba trabajando en un sistema para la identificación de drones y sus pilotos en pleno vuelo, siguiendo (con bastantes licencias, eso sí) la línea de las propuestas de la FAA. El DJI Remote ID ya es una realidad y el pasado 17 de febrero DJI publicó un vídeo explicando en qué consistía el sistema:
Los colorines y la alegre animación contrastan y mucho con lo que realmente propone este sistema.
¿En qué consiste el DJI Remote ID?
Básicamente y explicado de forma muy resumida, con una actualización del firmware del dron, éste será capaz de transmitir por WiFi la posición del dron y del piloto a cualquier smartphone con la app correspondiente instalada.
Como ya decíamos, el futuro de los drones parece pasar de manera forzosa por el hecho de que los pilotos pierdan privacidad. El mayor motivo, sin ir más lejos, de que no podamos (o de que sea tan difícil) volar en determinadas zonas es simplemente que un piloto de drones que vuela en espacio aéreo controlado y compartido con otras aeronaves (tripuladas o no) supone un riesgo, puesto que la comunicación y coordinación con los controladores y los pilotos del resto de aeronaves es muy compleja.
Dicho de otra forma: si sueñas con que algún día puedas volar tu dron sobre alguna gran ciudad, vas a tener que compartir en directo prácticamente todos los aspectos de tu vuelo con el resto de usuarios del espacio aéreo que ocupes. Personalmente es un precio que estaría dispuesto a pagar a cambio de expandir los límites que ahora mismo tiene el vuelo de drones.
Pero eso sí: la pérdida de privacidad debe venir de la mano de nuevas posibilidades, porque de lo contrario estamos haciendo un pésimo negocio. Y sobretodo, la solución no pasa por el Remote ID que ha diseñado DJI, ya que las condiciones en las que se implantará este sistema son pésimas.
¿Por qué el DJI Remote ID plantea más problemas que soluciones?
Dejamos de lado el hecho de que que a nadie le gusta perder su privacidad.
Vamos más allá del hecho de que si vuelas de forma legal, esto “no te afecta” (porque te afecta y mucho, como voy a explicar más adelante).
Obviamos (expertos en derecho y en la constitución deberían confirmarlo) que poner a disposición del público ciertos datos que quedarán expuestos gracias a esta App podría vulnerar derechos fundamentales de privacidad.
Aceptamos la realidad de que volar un dron para muchos ha dejado de ser divertido por la complejidad de las normas y la noción negativa que tiene el público en general sobre los drones, a pesar de que los drones de uso civil son un motor de la economía y hasta salvan vidas, mientras que a día de hoy todavía no ha habido una sola víctima mortal debida a un accidente con estos aparatos.
La realidad es que Remote ID, lejos de mejorar la seguridad de las operaciones, la empeora y mucho: el hecho de que cualquier persona pueda con una app saber dónde está el piloto del dron que ven a lo lejos plantea muchísimos problemas:
Un piloto de drones (que pueden valer varios miles de euros) se encuentra siempre en una posición muy vulnerable frente a cualquier intento de robo, como para facilitar además su localización exacta a literalmente cualquiera que pase por allí.
Los drones son un imán para curiosos que, sin mala intención, se te acercan en pleno vuelo, cuando toda tu atención debe estar dirigida al dron, a hacer preguntas o a ver qué se ve desde la pantalla. Dar herramientas para que te localicen de manera más fácil sólo nos pone en más situaciones comprometidas.
Ahora mismo y sin ayuda del Remote ID ya ocurre que durante algunos vuelos legales, personas que desconocen la normativa se te acerquen, cuestionando la legalidad de los mismos. Si un piloto de drones está volando de manera legal, estará tranquilo de dar las explicaciones pertinentes al policía o guardia civil que lo requiera, no a cualquiera.
Antes de abrazar cualquier tipo de solución que permita a nadie localizarnos, hay que dejar claro que volar con drones exige el 100% de la atención del piloto para hacerlo con seguridad, y si finalmente esta aplicación sale adelante de la forma que está planteada, apuesto mi dinero a que va a provocar accidentes innecesarios.
Es más: por ley a los pilotos se nos exige proteger nuestros vuelos de cualquier acto de interferencia ilícita (que puede ser física o no), y tener una diana sobre nuestra espalda hace esta tarea mucho más complicada.
Por ley, un piloto de drones es la máxima autoridad en el vuelo de su aeronave, y aunque un policía le exija bajarla, el piloto está amparado por la ley y por su manual de operaciones para no bajarla si juzga que esto perjudica a la seguridad de la operación (lo cual no le exime de tener que dar explicaciones una vez haya finalizado el vuelo).
Vería con buenos ojos que la información que va a poner disponible Remote ID fuera sólo visible para las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, responsables de la gestión del tráfico aéreo e incluso personal de seguridad de algunas instalaciones, pero no veo ninguna ventaja (y sí muchos problemas) a que esta información esté disponible para Fulano y Zutano, con todos los respetos a ellos.
¿Existe una alternativa para los pilotos?
La actualización al DJI Remote ID tiene tan descontentos a muchos pilotos que algunos han manifestado que sus drones de DJI van a ir directamente al mercado de segunda mano, o han señalado que hay alternativas de otros fabricantes que no amenazan con implantar un sistema similar. El problema es que esta medida sienta precedente, y podría hacer que las distintas legislaciones sólo lleguen a permitir el vuelo de drones con sistemas de identificación similares. Además, este sistema se implanta con una simple actualización de firmware, por lo que comprar un dron de otro fabricante no te asegura que no vaya a tener un sistema similar en algún momento.
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