La tecnología de la impresión 3D avanza y con ello la innovación en la industria cárnica, por ello diferentes compañías de impresión 3D están ampliando sus conocimientos en este ámbito para poder fabricar carne cultivada usando impresoras 3D.
La industria cárnica en 3D
La carne alternativa es un sector popular para los inversores de todo el mundo en los últimos años, impulsado por la preocupación por el medio ambiente y la creencia de que la industria cárnica no puede satisfacer a la creciente población mundial.
Es por eso que las empresas israelíes están tomando la iniciativa y no quieren simplemente crear un nuevo producto alimenticio, si no diseñar un nuevo proceso de producción.
Meatech, una empresa israelí fundada en 2018 con sede en Nes Tziyona está imprimiendo filetes en 3D, creando carne cultivada en laboratorios producida por cultivos celulares in vitro tomadas de vacas.
La carne se produce mezclando células madre de animales con proteínas nutritivas en un biorreactor, donde las células crecen y se multiplican reuniéndose en pequeños grupos dando lugar a un tejido.
¿Cómo lo hacen?
Haron Firma, CEO de Meatech dice que la compañía está enfocada en producir múltiples filetes para poder comercializar en el mercado industrial. Por ello, la empresa está desarrollando una impresora 3D con diferentes cabezales de impresión.
Esta carne de aspecto a la gelatina se realiza gracias al cabezal único de su tipo de la impresora 3D . El innovador cabezal rocía la bandeja con capas de tinta biológica que contiene las células madre embrionarias de un ternero. Esto se hace rápidamente permitiendo crear diferentes tipos y sabores de filetes.
Han planteando presentar su patente para la mundo de la impresión: la tinta biológica y la producción a nivel industrial de tejidos vivos.
Hay que resaltar también que Tal Dvir, un científico de Meatech fue galardonado el año pasado por lograr imprimir en 3D un corazón humano vivo. Además, producir carne impresa en 3D tiene un reto ya que según Dvir “ Tenemos que diferenciar entre los tejidos comestibles y los tejidos médicos”.
Se espera que para finales de 2020 se pueda imprimir tejido cárnico en 3D incluyendo tendones, células sanguíneas, grasa y cartílagos y produciéndose de esta manera una textura similar a la de la carne.
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