En la impresión 3D, es tan importante el desarrollo de materiales como el de las propias impresoras. Durante estos últimos años hemos visto grandes avances en las impresoras 3D domesticas.
Los materiales disponibles en el mercado continúan creciendo a una velocidad increíble. En 2012 los materiales con los que se podían imprimir eran PLA o ABS, mientras que otras opciones como nylon o filamentos de madera estaban aún en desarrollo. Hoy en día puedes encontrar de manera asequible desde metales compuestos, policarbonatos, fibra de carbono a materiales resistentes.
El ultimo lanzamiento al mercado es NylonX por parte de la compañía MatterHackers.
El NylonX se posiciona como el material más fuerte de la compañía, entre sus propiedades se pueden destacar una gran resistencia química, a la abrasión y al impacto. Ha sido diseñado para ser una alternativa a la hora de imprimir piezas funcionales.
Mientras que el nylon ha sido considerado uno de los filamentos más fuertes del mercado, su gran desventaja ha sido la dificultad que supone trabajar con el. La solución según MatterHackers es combinar trozos de fibra de carbono, alrededor de un 20% por peso en la mezcla de nylon.
“Añadiendo fibra de carbono al nylon, podemos aumentar la rigidez, reducir el ratio de contracción y la cantidad de agua que puede absorber, mientras que se mantiene la durabilidad y la dureza del nylon” Asegura el equipo de MatterHackers
El equipo también sugirió que el nylonX puede ser una alternativa al aluminio en un gran numero de aplicaciones.
Como todo, las pruebas están en los hechos y MatterHackers ha pasado por una larga lista de pruebas para demostrar como el NylonX es comparable a los mejores filamentos del mercado. Está disponible por un precio de 65$
Técnicamente hay una mala noticia, algunos extrusores o impresoras 3D podrían ser incompatibles cuando el filamento comienza a imprimirse en las condiciones necesarias. Se necesita una temperatura de entre los 250 – 265°C, una cama caliente entre los 60 y 70ºC , una boquilla de acero y de 0,6 mm, en lugar de las boquillas estándar de 0,4 mm.
Si tienes una impresora 3D que pueda con todo esto, estás listo para crear objetos con NylonX y ser testigo de todas las pruebas que MatterHackers ha realizado.
Prueba con NylonX
Prueba con PLA
Las pruebas han consistido en imprimir en 3D un mosquetón en una gran variedad de materiales en un tamaño similar al que puedes encontrar en el mercado. Usaron la misma impresora 3D para todos los materiales, e incluso también hicieron pruebas con la boquilla convencional de 0,4 mm con la misma altura de capa, densidad y patrón del relleno. Después los mosquetones se probaron con un sistema de bloqueo y poleas para saber cuanto podían resistir los diferentes materiales.
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