La impresión 3D en gran formato y la industria del motor han llegado para quedarse. Podemos ver grandes avances en el sector de la industria de fabricación aditiva y con ello también en el sector de la automoción.
La fabricación aditiva es un gran ejemplo de la utilización de las nuevas tecnologías, por ello McLaren 720S, el coche de alta gama ha sido creado con partes fabricadas en impresión 3D sustituyendo de esta manera los métodos tradicionales que son más costosos y lentos en la producción.
La tecnología de la automoción en la fabricación 3D
Las piezas de carrocería suelen ser grandes por lo que generalmente tardan mucho más en fabricarlas, por eso la impresión 3D ha sido una gran apuesta mucho más rentable.
1016 Industries está detrás del proyecto deportivo McLaren 720S que se ha presentado este mismo mes. Además, se han necesitado cuatro meses para diseñar y producir las piezas principales en 3D.
Utilizaron una impresora 3D SLA para imprimir las partes de la carrocería. Estas impresoras utilizan resina 3D como materia prima para las impresiones consiguiendo una precisión de micrómetros.
Algunas de las partes impresas fueron el capó, el alerón, las puertas, el fusor y el parachoques.
De esta manera, al fabricar piezas en 3D se ha reducido el coste de fabricación. Todo esto ha hecho que se pueda fabricar mucho más barato y por consecuente, reducir los precios y vender más cantidad o fabricar un mayor número con el mismo presupuesto.
En un futuro 1016 Industries, la empresa americana, tiene previsto que los propios usuarios sean capaces de imprimir sus propias piezas de automoción, pero no solamente los de este modelo, si no de modelos que se presenten en un futuro cercano.
¿Que te parece esta iniciativa? Es toda una revolución para el sector de la automoción y la impresión 3D.
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