Structur3D Printing, una empresa con sede en Kitchener (Canadá), ha creado una cabeza de extrusión para impresoras 3D que permite a los usuarios imprimir materiales blandos.
Llevando tan sólo 24 horas de campaña en Kickstarter ha alcanzado su objetivo de 30.000 dólares. El dispositivo, llamado Discov3ry se puede integrar fácilmente a las impresoras 3D de escritorio y permite imprimir en materiales blandos como silicona, arcilla e incluso Nutella.
Según asegura la marca, hasta ahora, nadie había sido capaz de crear con éxito un extrusor de materiales pastosos. En los demás intentos, siempre se han encontrado con ciertas limitaciones, ya sea por el volumen de los cartuchos, por lo que sólo podían imprimir piezas muy pequeñas, o bien por la necesidad de una limpieza profunda entre impresión e impresión. Sin embargo, el sistema de Discov3ry está diseñado para que pueda alternar diferentes materiales sin que se contaminen unos a otros. Los materiales se mantienen en cartuchos independientes con un tubo conectado y una punta de impresión. Estos dos últimos se cambian a la vez que el material.
Para poder usar este kit, deberás realizar los ajustes pertinentes en los parámetros de impresión para acomodar la máquina al tipo de material que se está usando, así como elegir la punta extrusora adecuada para manejar la viscosidad del material. Por ejemplo, si se trata de Nutella, la punta extrusora deberá ser más fina, a diferencia de si se tratase de silicona, que la punta extrusora debería ser más ancha. El material pastoso es cargado usando cartuchos de 60 cc recargables.
En cuanto al precio, el primer lote de extrusoras Discov3ry salió en la plataforma de Kickstarter por 249 dólares. La totalidad de la producción, por el momento, se llevará a cabo en Canadá. En el caso en que la marca alcance el millón de dólares en Kickstarter comenzarán la fabricación en el extranjero.
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