Estados Unidos atraviesa también una de las peores recesiones económicas de su historia y conscientes de ello, el presidente Obama anunció en su mensaje semanal del pasado día 1 de marzo su intención de invertir en tecnología e infraestructuras para generar empleo, incluyendo explícitamente dentro del campo de la tecnología, inversión en impresión 3D.
En su mensaje original, el presidente estadounidense dice que va a optar por la apertura de nuevos centros de fabricación así como la creación de concursos para la financiación de infraestructuras de transformación.
Tras haber perdido un tercio de los puestos de trabajo de la industria estadounidense debido al estallido de la burbuja inmobiliaria, Obama está convencido de que el ciclo de la economía ha cambiado y EEUU puede y debe ser un imán que atraiga las mejores oportunidades laborales.
Para ello, el presidente norteamericano está convencido de que su país debe asegurarse de que está a la vanguardia de las nuevas tecnologías y de las técnicas de fabricación y de que en la economía global en la actualidad, los trabajos más reconocidos giran en torno a las infraestructuras de primera clase.
Ambas políticas están encaminadas a ampliar las oportunidades económicas del país mediante la creación de nuevos puestos de trabajo así como garantizar la supervivencia a largo plazo de la economía estadounidense y puede materializarse mediante la creación de una red nacional de centros de fabricación de alta tecnología y la inversión en la reconstrucción del sistema de transporte del país que mejoren las comunicaciones, afirmaba en esta línea el presidente Obama.
Para trabajar en esta línea, está anunciado la puesta en marcha de dos nuevos centros donde las empresas y las universidades llevarán a cabo mediante asociación, la investigación innovadora en productos bajo el sello “made in America”. En este campo es donde tiene cabida la impresión 3D como uno de los modelos productivos que distingan la producción americana y permita a los norteamericanos situarse en una posición privilegiada en cuanto al manejo y control de esta nueva tecnología. Pero también dentro de esta línea se encuentran la inversión en metales ligeros y fabricación digital.
La otra estrategia basada en la renovación de las infraestructuras del Siglo XXI pasan por la mejora de carreteras y puentes de tránsito masivo así como la creación de una red de transportes por ferrocarril más rápido y la mejora de las comunicaciones con el exterior, que facilite a las empresas enviar sus productos a todos los rincones no sólo del país sino del mundo, de forma rápida.
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Fuente: White House Gov.
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