Como sabemos, las aplicaciones que las impresoras 3D están llegando a ofrecer son realmente increíbles. En el ámbito de la medicina ha conllevado un gran avance en muy poco tiempo. Se han creado prótesis impresas en 3D, tejidos biológicos e incluso se puede practicar una operación antes de realizarse en un paciente, lo que ayuda a obtener mejores y precisos resultados.
En el Hospital Ortopédico de Zhengzhou (China) se ha llevado a cabo una delicada operación de columna a una paciente, Yan, que padecía entumecimiento y falta de sensibilidad y de fuerza en sus extremidades. Los médicos descubrieron que la paciente tenía una malformación grave en la tercera vértebra cervical, conocida como dislocación atlantoaxial, que hacía que los nervios de la parte posterior de su médula se comprimieran.
La médula espinal es una zona extremadamente delicada y es difícil operar alrededor de ella, ya que un pequeño fallo del cirujano puede dejar tetrapléjico al paciente o causarle la muerte. El Dr. Mei Wei y el equipo de médicos, decidieron ensayar la operación con una réplica impresa en 3D de la columna de Yan para realizar posteriormente la intervención con mayor seguridad.
Con las imágenes tomadas de los Rayos X y de las tomografías, se enviaron a la impresora 3D y se fabricó la réplica casi exacta de la columna. Sin esta tecnología, los cirujanos no hubieran podido ver completamente el procedimiento que iban a llevar a cabo y, por ello, el tener impresa la columna, les permitió llevar a cabo la intervención con rapidez y precisión.
Un mes después de la operación, la paciente ya había conseguido una notable mejoría tanto por la ausencia de entumecimiento como por la mayor fuerza en sus extremidades. Es este otro ejemplo de éxito en el ámbito de la medicina gracias al crucial papel que desempeña la impresión 3D.
La industria de la medicina ha avanzado considerablemente gracias a la tecnología que han aportado las impresoras 3D y, de acuerdo con muchos investigadores y cirujanos, este es solo el principio.
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