La evolución de la impresora 3D
Como todos nosotros sabemos, la tecnología de impresión 3D está avanzando año tras año a un ritmo que sorprende a nosotros mismos y a extraños. Constantemente se leen y se escuchan noticias acerca de lo que se prevé que la impresión en 3D será en el futuro. Pero, ¿hasta qué punto son realistas estas previsiones?
La opinión de Labelle
Hoy nos hacemos eco de las declaraciones de Chris Labelle, co-fundador y director de Mosaic Manufacturing, una empresa dedicada a la personalización digital, cuyos trabajos destacados son la producción de software de diseño 3D y al mismo tiempo son desarrolladores del proyecto Palette, un sistema que consigue realizar trabajos de impresión con hasta cuatro tipos de filamento diferente sin requerir boquillas de extrusión adicionales.
Según Labelle, la impresión 3D va a evolucionar de una tecnología de fabricación que se utiliza de manera aislada, a un uso mucho más habitual en los procesos de fabricación. La combinación de la impresión 3D con otras formas de tecnologías de fabricación aditiva permitirá a los consumidores obtener el resultado de las capacidades de personalización que ofrece la impresión en 3D, además de poder disfrutar del acceso a la gama de productos que pueden ser creados también por otro tipo de tecnologías.
Esta combinación de tecnologías y procesos de fabricación tendrá un impacto significativo en la forma de crear y consumir productos. Por un lado, la impresión 3D será más eficiente y más viable económicamente para la fabricación a gran escala. También los productos fabricados de forma tradicional, podrán adquirir elementos de personalización que los doten de cierta exclusividad. Y además, los consumidores se beneficiarán al poder obtener productos más complejos y personalizados a cambio de unos costes inferiores.
Chris Labelle afirma que los patrones que va a seguir la tecnología 3D se resumen principalmente en tres líneas o ejes principales. Fiabilidad, mayor rotación y más capacidad de automatización. De esta manera se augura que el factor diferenciador de la impresión en 3D, que es su capacidad de crear productos a medida, se vea totalmente reforzado gracias a estos tres patrones mencionados y a una considerable reducción costes de fabricación.
Esto significa que en los próximos cinco años la industria de la impresora 3D crecerá, y así va ha poder captar unos 12 billones de dólares del mercado. En palabras de Labelle, son pasos que van a darse en estos años venideros, pero que no se darán de un día para otro. Se necesita de un gran esfuerzo, compromiso y confianza de un gran número de empresas e inversores.
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