La creación de viviendas accesibles mediante impresión 3D podría ser la solución para reducir la cantidad actual de población “sin techo”.
La tecnología es la única que puede ayudar a reducir la brecha existente entre los países industrializados y los países en vías de desarrollo.
Muchos de los que estudian las aplicaciones de la tecnología de la impresión 3D creen que pueden ayudar a abordar el tema de la vivienda de una manera sencilla y TRIDOM, una start-up de Israel, está entre ellos.
A pesar de que ya se ha presentado en una conferencia celebrada en la NASA, el proyecto TRIDOM se encuentra todavía en las primeras etapas de su desarrollo. El equipo detrás de TRIDOM, Anielle Guedes y Yaron Schwarcz, ha estado investigando los diferentes enfoques que existen sobre la impresión 3D de viviendas de modo asequible y sostenible. Tres mil millones de personas viven con una media diaria de menos de 2,50 dólares. Y aunque las opiniones varían en cuanto a si realmente existe un mercado en la selección de la población de menores ingresos en la Tierra, la falta de vivienda adecuada es un problema que aqueja a miles de millones de personas y que está destinado a empeorar en las próximas décadas.
El equipo de TRIDOM está desarrollando un marco impreso en 3D que en realidad funciona como un brazo robótico que extruye cemento. El material, concretamente, será cemento reciclado de edificios demolidos. Se está trabajando en el robot que mejor permita alcanzar los objetivos principales de este proyecto: reducir los costes asociados con la construcción y disminuir la cantidad de residuos resultantes de una obra.
A pesar de que será un proyecto a largo plazo (aunque con la tecnología nunca se sabe), TRIDOM ya ha recibido el apoyo de Thornton Tomasetti, un prestigioso estudio de arquitectura responsable de seis de los edificios más altos del mundo.
https://www.youtube.com/watch?v=Q7ACTSy3SwE
(Ver también: “Casas impresas en 3D para el tercer mundo”)
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