Llegará el momento en el que algunas enfermedades complementen sus tratamientos con impresoras 3D. Mediante la impresión 3D, seremos capaces de fabricar órganos, tejidos y prótesis totalmente personalizadas a cada persona.
Por el momento, se está investigando con animales, aunque también se están haciendo algunos experimentos ocasionales en personas. El último ha sido llevado a cabo en el Hospital de la Universidad Zhejiang, en China. Allí, un joven de 21 años que padecía un tumor en su columna vertebral, de los conocidos como muy raros, ha sido intervenido para colocarle una prótesis a medida, fabricada en un laboratorio con una impresora láser en tres dimensiones.
El joven arrastraba desde hacía tiempo dolor en el pecho, y el pasado mes de noviembre, vio como estos dolores se intensificaron y era incapaz de soportarlos. Así pues Wang Lin, el joven, se decidió a ir al doctor y éste le diagnosticó un “ fibrosoma osificante ´´. Este tumor era el responsable de las lesiones óseas que a Lin se le estaban formando en su columna. Según decían los médicos que le atendieron, “dos de sus vértebras torácicas se habían dañado por completo´´.
En casos similares al de Lin, la intervención llevada a cabo es una cirugía en la que extirpan las lesiones. En la mayoría de los casos suelen dejar las vértebras muy deterioradas y es necesario reforzarlas con una prótesis. El mayor problema es que éstas son estándar, se suelen clasificar por tallas. Según palabras de José Becerra, investigador del Centro de Investigación Biomédica en Red, Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina (Ciber-bbn) y catedrático de Biología Celular de la Universidad de Málaga “Tienen tallas, pero distan mucho de ser perfectas´´. En la mayoría de los casos, los pacientes suelen quedarse con daños permanentes, pues la estructura ósea de cada persona es diferente.
Así pues, de cara a poder dar a Lin unos mejores resultados en su intervención quirúrgica, los doctores que le intervinieron decidieron emplear una impresora 3D con la que, mediante el escaneo de las vértebras de Lin, un programa de diseño asistido por ordenador permitió trazar las dimensiones exactas de la pieza que requería el paciente. El modus operandis de la impresora es “capa a capa, funde el titanio con láser, pero manteniendo los perfiles del fichero informático´´ hasta lograr un implante que se ajuste perfectamente. La intervención se llevó a cabo, con una incisión en el pecho de Lin, a través de la que insertaron esta lámina reticulada, ligera y flexible, tras limpiar la zona afectada. Los doctores que la llevaron a cabo dicen que la operación fue un éxito y que la recuperación de Lin será completamente satisfactoria.
El material empleado para fabricar esta prótesis fue el titanio, ya que es un material contra el que no lucha el sistema inmunológico. Pero éste no es el primer caso de vertebras fabricadas con impresoras 3D que se usan en seres humanos. Ya que en el mes de agosto, el Hospital de la Universidad de Pekin, hizo algo parecido con un niño de 12 años; en este caso reemplazaron la vértebra enferma por otra nueva de titanio.
La tecnología de impresión 3D está empezando a ser más común en los laboratorios y se están creando prototipos de riñones, piel, orejas, corazón, etc; aunque ya se ha realizado el trasplante de alguna vejiga y tráquea. Incluso se ha llegado a salvar la vida de un bebé de 20 meses en un hospital estadounidense gracias a la impresión 3D.
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