La robótica y la impresión 3D nos proporciona una reducción de tiempo y costes de producción a la vez que fabricación. Estamos acostumbrados a ver a robots que hacen diversas tareas de la vida diaria. Pero no robots que realizan movimientos complejos, como saltar, caminar y navegar en diferentes terrenos.
Investigadores de la universidad de Tandom de Nueva York ( NYU Tandon) y el Instituto Max Planck de Sistemas Inteligentes de Alemania han trabajado para diseñar y producir el modelo de un perro robot cuadrúpedo llamado, Solo 8 a través de la impresión 3D.
El modelo creado es aproximadamente del tamaño de un perro rápido y fácil de montar, con un bajo coste. Además es un proyecto de código abierto, por lo que diferentes laboratorios de investigación pueden replicarlo y modificarlo fácilmente.
Las piernas pueden cambiar entre las cuatro configuraciones de rodilla, además puede mover la cadera 360º, las piernas se pueden girar hacía delante y hacía atrás. Además, si cae de espaldas puede reorientar sus patas y ponerse de pie sin girar el tronco.
Ludovic Righetti , profesor asociado de ingeniería eléctrica e informática e ingeniería mecánica y aeroespacial en NYU Tandon, dirigió el equipo del robot canino, solo 8.
EL objetivo del equipo era crear un robot accesible , por lo que redujeron la cantidad de piezas y utilizaron la tecnologia FDM como solución para ello.
El robot se ensambló a partir de las cuatro patas idénticas y la estructura del cuerpo, impresa en 3D. Pesa un poco más de dos kilogramos, por lo que tiene una mejor relación/ peso que la mayoría de los robots cuadrúpedos. Esto lo hace más seguro y fácil de manejar.
Su control está hecho a través de tableros electrónicos y su tecnología de información. Además, todo el contenido electrónico y de robótica se encuentra dentro de la carcasa del cuerpo impresa en 3D.
Proyecto de código abierto imprimible en 3D
El equipo ha puesto a disposición todos los archivos de construcción de forma gratuita en GitHub, así otros investigadores podrán recopilar y compartir datos de sus propios experimentos.
Ludovic Righetti, profesor asociado de NYU Tandon dijo“Ya muchas universidades se nos han acercado y desean hacer una copia de nuestro robot y usarlo como plataforma de investigación”
En conclusión, los proyectos de código abierto como este realmente están en línea con el espíritu de la comunidad de creadores: al compartir nuestro conocimiento con otros, en lugar de mantenerlo en secreto, podemos trabajar juntos para lograr grandes cosas.
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