Si te preguntara en este momento qué es una pila de hidrógeno, es probable que no sepas exactamente de qué se trata, pero seguramente hayas escuchado algo al respecto. La pila de hidrógeno es un invento del que se está hablando mucho últimamente, y algunos expertos opinan que dentro de esta pequeña caja de plástico se encuentra el corazón del coche del futuro. Pero, ¿sabías que la ciencia tras la pila de hidrógeno tiene más de 200 años?
Desde sus inicios, la pila de hidrógeno ha estado vinculada al agua. Y, ¿qué sabemos del agua hace 200 años? Pues sorprendentemente bastante. Hace 240 años, los químicos franceses Antoine Lavoisier y Marie-Anne Pierrette Paulze habían roto con una teoría milenaria que afirmaba que el agua era un elemento químico. En realidad, estaba formado por dos gases recién descubiertos: uno capaz de avivar la llama, al que llamaron oxígeno, y otro que era un gas inflamable. Juntos, formaban este líquido tan abundante en nuestro planeta. Gracias a esta reacción, el gas inflamable recibió su nombre: hidrógeno, el creador del agua.
En este canal ya hemos hablado del hidrógeno y del agua en el vídeo de Este elemento, en el que vimos lo violento que llega a ser la reacción del hidrógeno y el oxígeno, en la que se libera una gran cantidad de energía que resulta exclusiva gracias a los Lavoisier. Así es, se preparará agua pura a partir de estos dos gases. Aunque conseguir lo inverso todavía suponía un reto inalcanzable. Sabemos que un hidrógeno y oxígeno liberaban calor y formaban agua, pero darle calor al agua no formaba hidrógeno y oxígeno. ¿Por qué? Esto fue un quebradero de cabeza para los químicos de entonces y permaneció sin respuesta durante varias décadas, hasta que llegó a los laboratorios un nuevo descubrimiento: la electricidad.
En los últimos años, el precio de los combustibles y las normativas medioambientales han disparado el interés por el motor de hidrógeno, un motor eléctrico que se alimenta exclusivamente con una pila de hidrógeno combustible. Empresas como Volkswagen están apostando por coches con estos motores; el último modelo que han sacado tiene una autonomía de 2000 km. Sin embargo, no es necesario adquirir un coche nuevo para experimentar con esta tecnología, ya que existen kits de juguete que te permiten mover tanto un pequeño motor de hidrógeno como un coche de juguete con este sistema.
El sistema es compacto y sencillo. Las que se usan para este vídeo son de un kit de juguete y funcionan genial. En la descripción, pondremos un enlace para que puedas conseguir estos kits de juguete y experimentar con ellos en casa. Además, estarás ayudando al canal a seguir creando contenido de calidad y entretenido.
Este emocionante kit de hidrógeno convierte el agua en combustible limpio y sostenible, ¡ideal para enseñar a los niños sobre energías renovables y cuidado del medio ambiente! Asegúrate de supervisarlos en todo momento mientras aprenden y disfrutan.
El motor de hidrógeno representa una alternativa sostenible en ciudades densamente pobladas. Ayuntamientos como el de Barcelona han añadido a su flota de autobuses y vehículos de transporte público, los llamados "ecobuses" o "ecoaguas", unos vehículos que funcionan con pilas de hidrógeno. Tanto mi maestro Joseph Durán como yo fuimos invitados a la presentación de la primera guagua de hidrógeno de España, y la experiencia fue emocionante. La celda de hidrógeno se encuentra en la sección blanca del techo para facilitar la entrada de oxígeno y la refrigeración.
Usar hidrógeno en lugar de gasolina tiene sus ventajas aparte de las medioambientales, como la densidad de energía. Para conseguir la energía que hay en un kilogramo de hidrógeno gaseoso, necesitamos casi 3 kilos de gasolina. Además, el hidrógeno es mucho más ligero que la gasolina y el propio aire, y en caso de accidentes se dispersará rápidamente.
Sin embargo, como todo, también hay problemas. Uno de ellos es el propio origen del hidrógeno. Este elemento es lo que se conoce como un vector energético, lo que significa que solo estamos usando el hidrógeno para almacenar en él la energía que le añadamos; no lo genera. Para obtener ese hidrógeno se han usado fuentes contaminantes, por lo que hemos creado una gama de colores, los colores del hidrógeno, en función de cómo se obtenga. Por ejemplo, marrón si se obtiene del carbón, azul del petróleo y rosa de la electricidad de centrales nucleares. Para que el motor de hidrógeno sea 100% renovable, tenemos que garantizar que sea de hidrógeno verde, obtenido de fuentes renovables como la energía solar o eólica.
En definitiva, el motor de hidrógeno es una alternativa sostenible y emocionante para la movilidad. Aunque aún existen problemas para resolver, como la obtención de hidrógeno renovable, estamos en el buen camino para crear una sociedad más sostenible y amigable con el medio ambiente.
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