Por primera vez, SpaceX logró aterrizar con éxito su gigantesca nave Starship tras una prueba de vuelo de gran altitud. Sin embargo, el prototipo explotó pocos minutos de lograr este hito. «RIP SN10, baja honorable», tuiteó Elon Musk después del evento.
El prototipo SN10 realizó la prueba en Boca Chica, Texas y logró lo que sus predecesoras, el SN8 y el SN9 no pudieron: tocar suelo sin estallar o estrellarse. La nave logró un ascenso de diez kilómetros y luego realizó un viraje para volar en posición horizontal. Para ello, realizó la maniobra belly flop en la que el cohete cayó en picado y, a pocos metros de la superficie, se colocó en vertical de nuevo. El éxito de la prueba fue que logró descender suavemente hasta tocar tierra.
«¡La nave espacial SN10 aterrizó en una sola pieza!», tuiteó Musk, una hora después de la explosión. «¡El equipo de SpaceX está haciendo un gran trabajo! Un día, la verdadera medida del éxito será que los vuelos de Starship sean algo común».
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La explosión del SN10 según revelaciones de Musk
Tras tocar el suelo, con cierta violencia, se desató un incendio a su alrededor. Ocho minutos después, la nave explotó. Según reveló Elon Musk, la causa de la explosión se debería a que el motor sufrió una falta de empuje durante el aterrizaje. Esto habría ocasionado una «ingestión parcial de helio del tanque del cabezal de combustible». Es decir, el cohete aterrizó demasiado rápido, provocando un impacto brusco que generó una reacción en cadena que terminó en la explosión.
Musk escribió en Twitter:
El motor SN10 tenía poco empuje debido (probablemente) a la ingestión parcial de helio en el tanque del cabezal de combustible. El impacto de 10 m/s aplastó las patas y parte de la falda. Se están realizando varias correcciones para el SN11.
Este no fue el único factor. A la explosión también se sumó que la presurización del motor había sido una solución a lo ocurrido con el SN8. Es decir, la solución resultó en un error en el nuevo modelo. Además, agregó:
Si se hubiera utilizado la presurización autógena, lo más probable es que las burbujas de CH4 se hubieran convertido en líquido. Se usó helio en el cabezal para evitar el colapso del espacio vacío por salpicaduras, lo que ocurrió en un vuelo anterior. Mi culpa por aprobar. Sonaba bien en ese momento.
Las pruebas con Starship
Esta es la tercera vez que el Starship intenta completar un aterrizaje de pruebas. Las primeras tuvieron lugar en diciembre y febrero, con prototipos construidos a medias y resultados menos alentadores. El objetivo principal de estas pruebas es demostrar cómo funcionan los movimientos controlados de las aletas y propulsores. Así, pretenden controlar la maniobra belly flop: lograr que el cohete pase de posición vertical a horizontal.
La prueba con el SN10 tuvo un prototipo más complejo que los anteriores. Contó con tres de sus cohetes comerciales. Los resultados de la prueba dejan elementos muy positivos que le darán confianza a la compañía en los próximos pasos del proyecto.
Se sabe que SpaceX ya tiene otros prototipos en fase de ensamblaje, hasta el SN19. Por ello, no pasará mucho tiempo hasta que el siguiente prototipo empiece a volar. Elon Musk tiene previsto un primer vuelo orbital del Starship para finales de este año.
Los planes que tiene con la compañía son muy ambiciosos. Para comenzar, Elon Musk espera llevar a humanos a la Luna para 2023. Se sabe que en uno de estos vuelos llevará al millonario Yusaku Maezawa, quien invitó a ocho personas «del mundo entero» a acompañarlo. Son ocho plazas gratuitas a las cuales los interesados se podrán inscribir hasta el 14 de marzo.
Además, Elon Musk espera colonizar Marte con naves reutilizables como el Starship, naves tan grandes como para transportar humanos a largas distancias, aterrizar y despegar de nuevo.
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